En momentos como los que estamos viviendo, la manera en que lidera su negocio es la clave para mantenerse avanzando y creciendo. No son tiempos de agazaparse y esperar que las condiciones del mercado hagan lo suyo para saber hacia dónde dirigir su negocio. ¡Es tiempo de ACCIONAR al más Alto Nivel!

Una adecuada reconversión en su Empresa, bien vale la pena para alcanzar sus objetivos. Ciertamente reconvertirse, implica estar dispuestos a invertir tiempo, dinero y mucho esfuerzo en cambiar procesos, actualizar tecnológicamente nuestra planta productiva y mejorar los sistemas de información, así como los procesos operativos. Es cambiar en su totalidad nuestro modelo mental y la forma en como hemos venido haciendo negocios con nuestros clientes. Pero créalo, esto no se logrará por aterrizar en papel únicamente el Plan de Negocios. Se requiere Liderazgo en cada área de nuestra empresa, para asegurar que el cambio se produzca.

Un proceso de reconversión inicia con el proceso de cambio del Líder máximo en el negocio y esto implica modificar nuestra manera de pensar, escuchar y actuar. ¡Sin duda es el mayor esfuerzo en la primera del proceso de cambio!. Al cambiar nuestra manera de pensar y de actuar, estamos en posibilidad de re-enfocar con claridad nuestro negocio y en tal sentido orientar nuestra energías de la mejor manera para asegurar el éxito de nuestro plan de negocios.

COMIENZA CON EL LÍDER

Decidirse a cambiar no es fácil, sobre todo si en el pasado ha tenido éxitos con su Gestión y manera de ver las cosas. “Paradójicamente el éxito de ayer, puede significar su tumba hoy día”, así que debe armarse de mucho valor para realizar los cambios necesarios y volver a ganar credibilidad ante los suyos, porque es aquí donde radica su mejor fortaleza para ganar credibilidad, así como para lograr impactar en el mercado y frente a sus clientes.

Pero no enfocar a los suyos, puede implicar también el fracaso de su vida. Créame, estoy viendo empresas desfalleciendo por falta de un buen propósito y sobre todo porque los seguidores están abandonando a sus líderes.

Es tiempo de hacer lo correcto, es tiempo de volver a ganar la credibilidad de quienes le siguen, es tiempo de reorientar nuestras acciones para lograr el Triple Balance:

  1. Convertir a nuestra empresa en el proveedor elegido para nuestros clientes.
  2. Convertir A nuestra empresa en el empleador elegido por las personas.
  3. Convertir a nuestra empresa en la mejor opción para invertir en el mercado.

¿CÓMO PODEMOS HACERLO?

Una de las mejores maneras es haciendo lo que hacen las empresas de alto desempeño. Éstas se concentran básicamente en asegurar su plan de negocios, siguiendo éstos pasos:

  1. Fijando claramente sus objetivos: Tener clara la visión del negocio, y sobre todo actuando congruentemente con ello. La misión, visión, valores y el propósito de la empresa, es practicado congruentemente a lo largo y ancho de la organización, por todos los que en ella colaboran.
  2. Tratando a sus clientes de manera diferenciada: Van más allá del servicio al cliente, producen experiencias únicas e inolvidables para sus clientes y se concentran en éstos todo el tiempo.
  3. Trabajando al más alto nivel con sus colaboradores: Las empresas de alto desempeño, se han dado cuenta que FACULTAR ES LA CLAVE, y hacen lo necesario para asegurar que en la empresa, todos puedan crecer a partir de exhibir su potencial y al generar resultados de gran tamaño, también están listos para compensarlos. Han alineado los procesos humanos con la visión del negocio.
  4. Liderando correctamente al interior del negocio: Han logrado crear una cultura de liderazgo en toda la empresa y ésta es evaluada consistentemente a través de los indicadores de desempeño que conectan a la empresa con sus clientes.

El fijar los objetivos alineados al propósito de la empresa correctamente, es sin duda el primer paso en un proceso de Alineación, pues le permite a usted asegurar que cada puesto y área en la empresa, le agrega valor a la visión de su negocio. Esta acción es clave para la definición de indicadores de desempeño que habrán de asegurarse para satisfacer a los clientes y a su mercado. Es la base para orientar a todos sus seguidores a practicar una cultura centrada en el cliente.

Sin embargo, aún cuando Usted tenga claro el rumbo a donde quiere dirigirse, no lo logrará a menos que esté seguro también de que sus seguidores reciben el mejor trato, lo que implica:

  1. Tener el mejor proceso de selección para atraer a la mejor gente.
  2. Desarrollar el potencial humano, lo que implica invertir en su proceso de desarrollo.
  3. Retener a su personal, a través de “cumplir lo que se le promete” y actuando congruentemente con el propósito y visión de su Empresa, así como con los valores que se hayan definido para tal efecto.

Hecho lo anterior, deberá practicar el liderazgo correcto y asegurar que este estilo, lo practique toda la organización, de tal suerte que ello implica también medir constantemente el desempeño de sus gerentes y personal con mando, así como evaluar el costo que representan los índices de rotación, ausentismo y retención del personal, calidad de producto y servicio, satisfacción de los clientes, ventas, desperdicios, productividad, etc. La idea al final del día, es evaluar su desempeño en términos de su Liderazgo en cada área y asegurar que se encuentre alineado al plan de negocios. Es necesario comprender para ello,  que son los clientes quienes manejan a nuestra empresa y por ello es necesario también asegurarnos de su plena satisfacción.

Sin duda alguna, que para lograr lo anterior, es necesario desplegar las capacidades y potencial de quienes colaboran en la empresa y de alguna manera liberarlos para que actúen con relación a éste propósito y en tal sentido, tengan la posibilidad de ASEGURAR la máxima ejecución de los procesos internos. En virtud de lo anterior, usted deberá estar preparado para buscar a través de su modelo de gestión, la más alta participación de su círculo de influencia, de tal suerte que puedan lograr:

  1. Ser la empresa mejor manejada: Hablo de procesos claros de actuación, institucionalización, métricas de desempeño que sean retadoras y mantengan en alto el entusiasmo de todos por alcanzarlas. Le sugiero que tenga todos los puntos de control que sean necesarios sin que éstos le representen procesos burocráticos que le lleven a generar lentitud o parálisis en su nivel de actuación.
  2. Ser la empresa más productiva: Asegurar la más alta eficiencia en cada proceso interno, en cada departamento y área en la empresa, en cada puesto que tenga en la estructura. Es una búsqueda constante y hasta obsesiva por alcanzar la excelencia frente a nuestros clientes y a través de sus colaboradores.
  3. Ser la empresa más innovadora del mercado: Generar una cultura de liderazgo en todos los niveles existentes en la empresa, que permita aflorar la más alta exhibición del potencial de sus colaboradores al tiempo de implantar un sistema de reconocimientos que premie los resultados obtenidos por las personas que se encuentren por encima del nivel esperado de desempeño, de tal manera que mantengan en alto el entusiasmo por alcanzar su plan de negocios, por mantenerse en continuo aprendizaje,  y que por supuesto se asegure un alto grado de innovación y la  tan anhelada diferenciación en el mercado.

Así que reinvéntese de nuevo, cambie su nivel de pensamiento y actúe. Si requiere apoyo, alléguese de quién le puede ayudar a cambiar su modelo mental y de esa manera concebir las cosas de otro modo, asesórese con quién le pueda garantizar un nivel de concepción de ideas distinto y dispóngase a correr con sentido en el mercado donde participa.

Es tiempo de grandes líderes no lo olvide, y éstos, siempre siempre están abiertos al aprendizaje continuo. Dése cuenta que tiene en sus manos el material para continuar. Confíe en las personas que le rodean y reconozca sus aportaciones, seguramente le devolverán  con resultados todo aquello que usted invierta en ellos. En CEHU, siempre estaremos a sus apreciables órdenes para apoyarle para alcanzar éste propósito.